PROYECTO IPAF-FIDA de FIMI
ORGANIZACIÓN
Servicio Agrario de Tecnología y Organización Comunitaria (SATOC)
participantes directos
201
participantes indirectos
1,780

Instalación de un cercado de 10,000 m2 en el área destinada al Vivero Comunitario, con el objetivo de desarrollar diversas especies de uso múltiple para alimentación humana y animal, como Leucaena, Moringa, Kumanda Yvyra'i y diversos cítricos. Una parte de la producción se llevará a las parcelas de los interesados y otra parte permanecerá en el sitio como semillero para el futuro, de tal forma que la comunidad cuente con una base para consolidar la seguridad alimentaria. 

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Comunidad Boquerón, Comunidad Urukuy - Las Palmas / San Pedro / Paraguay
Lengua
Qom L'aqtaqa
POBLACIÓN
217
Altitud
61 m
EXTENSIÓN TERRITORIAL
2,777 ha
COORDENADAS
17,113
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La comunidad Urukuy - Las Palmas forma parte del distrito de Villa del Rosario y se encuentra a 82 km de la capital departamental (San Pedro). La comunidad Boquerón se ubica en la orilla del río Paraguay, el principal afluente del río Paraná y uno de los más importantes de la cuenca del Plata. Se caracteriza por sus aguas cristalinas y las tierras fértiles que irriga.

El cultivo es el futuro
Comunidad Boquerón, Comunidad Urukuy - Las Palmas / San Pedro / Paraguay
Fotografías Mayeli Villalba
texto Jorge Varela

A la orilla izquierda del río Paraguay, en el departamento de San Pedro, se encuentra una pequeña comunidad conocida como Urukuy Villa del Rosario, donde alrededor de 55 familias intentan adaptarse a los cambios que la historia reciente les ha impuesto. 

Urukuy Villa del Rosario es una comunidad Qom: una Comunidad Indígena descendiente y heredera de los desplazamientos forzados del siglo XIX y XX, cuando los nacientes estados nacionales sudamericanos determinaron que estas comunidades eran secundarias, si acaso pertenecientes, a los estados que estaban empeñados en construir.

En épocas precolombinas y durante la colonia, los ancestros Qom habitaban la región del Gran Chaco, que hoy se divide entre Paraguay, Argentina, Brasil y Bolivia, donde llevaban un estilo de vida nómada o seminómada, como cazadores recolectores. Estaban acostumbrados a recorrer grandes distancias cazando fauna silvestre a lo largo del año, y a pescar distintas variedades de peces en los ríos y arroyos del territorio. Para complementar, recolectaban variadas frutas estacionales y miel. 

Poco a poco, estas comunidades de cazadores recolectores perdieron la posibilidad de recorrer la región que conocían, pues ahora estaba atravesada por fronteras que se trazaron sin su consentimiento. La disminución de sus tierras es la otra cara de la moneda de las heroicas historias patrias de las naciones sudamericanas modernas. 

Aquellos que quedaron en Paraguay eventualmente fueron expulsados del Chaco por estacioneros dedicados a la cría de ganado vacuno. Con el apoyo de la Policía, prohibieron a los Qom la entrada al territorio.

“No queremos perder nuestra identidad, que es el idioma”.

“Hoy todo está privatizado y hay demasiadas prohibiciones”, lamenta Pedro Marengo Caballeros, líder de la comunidad Qom de Villa del Rosario desde hace 22 años. Esta comunidad es descendiente de grupos que, eventualmente, encontraron refugio en esta esquina del río Paraguay. El nombre completo de la comunidad, Qom Bagia Loge Lacheg, significa ribereño en su idioma. Su estilo de vida tradicional, sin embargo, resulta impracticable actualmente.  

Fue hasta 1994 que el gobierno de Paraguay les reconoció 154 hectáreas de este territorio. Esas se convirtieron en 2,777 en 1996, gracias a la insistencia comunitaria continua. “Y tienen suerte: hay comunidades que hasta la fecha no tienen escriturado el territorio y están siendo expulsadas”, cuenta Augusto Fogel, director de la organización Servicio Agrario de Tecnología y Organización Comunitaria (SATOC), una ONG paraguaya que trabaja con Comunidades Indígenas desde 1990. 

Los Qom de Villa del Rosario viven hoy en dos aldeas distintas dentro del territorio que oficialmente les pertenece: Palma, con unas 37 familias; y Boquerón, con otras 26 familias. Su lengua es el Qom L'aqtaqa, pero también hablan guaraní y español, como tercer idioma.

El Pueblo Qom es el último descendiente de la familia lingüística Guaicurú de origen pámpido-patagónico. En el pasado fueron uno de los grupos más numerosos de la región chaqueña.

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(4) Fue hasta 1994 que el gobierno de Paraguay le reconoció 154 hectáreas de este territorio a la comunidad Urukuy. Esas se convirtieron en 2,777 en 1996.  (5a-5b) La artesana Rosalía Caballero. Antes se acostumbraba talar los árboles de karaday. Hoy en día se usan herramientas adaptadas a los 20 metros de altura de la palmera para tomar sólo las hojas y conservar el árbol.  (6) Antes de las privatizaciones masivas de las tierras y de la destrucción de los montes, el Pueblo Qom vivía de la recolección, la pesca y la caza.

Ellos intentan sanar ahora las heridas de un pasado violento. Una particularmente dolorosa es la de la seguridad alimentaria. El trauma histórico de ser forzosamente desplazado del territorio es una cosa, obligarlos a que se adapten a un estilo de vida completamente distinto es otra. Las prácticas alimentarias de los Qom no han logrado adaptarse a la sedentarización forzada: eran cazadores recolectores nómadas, no agricultores. 

Para hacerle frente a esta problemática, por iniciativa de la comunidad y el SATOC, con el acompañamiento del Foro Internacional de las Mujeres Indígenas (FIMI) y el apoyo financiero del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), a través de su Fondo de Apoyo a los Pueblos Indígenas (IPAF), a mediados del 2019 se empezó a construir un vivero comunitario. También se empezó a brindar acompañamiento técnico para mejorar las capacidades agrícolas de la comunidad y diversificar su dieta. 

En el proyecto han empezado a sembrarse cultivos como la mandioca, la batata (camote), maíz y hortalizas. También se han impartido talleres sobre técnicas de riego que permiten a la comunidad enfrentar mejor los períodos de sequía. Por el momento el énfasis está en mejorar la seguridad alimentaria de las personas, pero se prevé continuar para fomentar la comercialización de algunos productos, como la miel y la yerba mate.

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(7) En Urukuy se crían animales de granja como vacas, gallinas, ovejas y cerdos para el autoconsumo. Los caballos ayudan a juntar el ganado del campo cuando acaba la jornada.   (8) La artesana Zulema Caballero lleva un sombrero hecho por su tía Magdalena con dos hojas de karanday. Una vez recogidas, se dejan secar por cuatro días.    (9) Nido de termitas.    (10) Magdalena Ozuna de 56 años. Una de sus principales fuentes de ingreso es la venta de sombreros y elementos tradicionales como las pantallas y la cestería.  (11a-11b) La mandioca o yuca es un alimento indispensable para la comunidad Urukuy. Las heladas de junio han dejado pocas hojas en las ramas.

Pedro Marengo expresa su alegría cuando habla del proyecto. Como líder de la comunidad le preocupan dos cosas principalmente: la alimentación de su gente y la educación de la juventud. El vivero comunitario está ayudando en ambos casos. Quizá los jóvenes descubran que quedarse en la comunidad también es una opción. 

Además, como parte del proyecto está previsto trabajar con las escuelas para fomentar la cultura y la lengua, aunque esto no ha podido llevarse a cabo ya que la pandemia provocó retrasos considerables. “No queremos perder nuestra identidad, que es el idioma”, dice Marengo.

Estudios del SATOC han demostrado que el territorio es fértil. Pedro se muestra esperanzado, “nuestro futuro es fortalecer nuestro conocimiento del cultivo”.

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(12a-12b) Los integrantes del Pueblo Qom entierran a sus muertos en medio del bosque, junto a los árboles nativos y sus frutos.   (13a-13b) Las comunidades desarrollan un proyecto productivo para el autoconsumo con el apoyo de FIMI. Las fincas particulares están rodeadas de árboles frutales.   (14) Don Pedro Marengo recuerda como antes se cazaba solo cuando era necesario y con respeto hacia el animal. La carne del ñandu guasu, un ave más pequeña que el avestruz, siempre fue su favorita y se compartía colectivamente.

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Comunidad Boquerón, Comunidad Urukuy - Las Palmas / San Pedro / Paraguay